viernes, 16 de julio de 2010

ADVERTENCIA


Te vas resbalando, tiempo, como se resbalan los amores gastados. Como cuando el incendio de tu boca era lo único que podía quemarme...

Ella no llora frente a nadie, está cansada de andar contando gotas saladas, últimamente se anda cansando de todo y de todos. Siempre anduvo de peligro en peligro, supo siempre en dónde se metía -y sin embargo- lo seguía haciendo. Desde hace tiempo que piensa en dejar caer el arma y darse por rendida, pero sabe que aún no termina la batalla, porque hay más, muchos más espacios que liberar, muchas gargantas por desenredar.

Ya no hay cielo ni infierno, solo hay lo que puede ver, y de eso depende lo que será, porque aunque siga siendo la chica de la mirada triste, empezará por dejar todo atrás, abrirá las puertas para que se larguen quiénes quisieron largarse, y para que no lo tomen a mal, envolverá los recuerdos con un bonito beso de despedida...
Y el que se quiere quedar, que se quede... pero ya conoce qué jodido se puede volver este asunto.