domingo, 9 de noviembre de 2008

NÓMBRAME UNA VEZ MÁS.


Que me permita el tiempo eliminar
TODO aquel recuerdo venenoso.
Que se raje el cielo, que se divida el mar,
que escupan los muertos,
que me disparen al despertar.
Que se pudra tu alma.
Y, cuando ya estés descendiendo al infierno,
me nombres una vez más.

Que se pudra la semilla de lo que nunca fue.
Que se consuman tus huesos, que ardan en soledad,
que se masturben los gusanos con tus cenizas.
Y, luego, nómbrame una vez más.

Yo, esperaré aquí sentada,
mientras planeo una muerte más.
Pondré el despertador por si desfallezco antes de lo planeado.
Y, para hacerte recordar que
debes mencionar mi nombre una vez más.



2 comentarios:

strato dijo...

que arda todo en el infierno
que ardas vos

strato dijo...

que arda todo en el infierno
que ardas vos